Germán Guerra: en todos los ramajes de la lengua






Cavafis
(Alejandría, 29 de abril, 1933)

Ya no importan los muros
donde me han encerrado
en el fondo del mundo
para otra eternidad.
En las crudas paredes
que niegan el ocaso
he pintado con sangre
con miedos y cenizas
una vieja ventana
que devuelve los pasos
los golpes de la historia
y estos cuerpos podridos
que fueron mis amantes.
Acodo la ventana
y contemplo las ruinas
la ciega luz del faro
el incendio del puerto
la vasta biblioteca
mis páginas mis versos
impresos en el aire
sosteniendo los templos
columnas plazas calles
rincones y fantasmas
que son esta ciudad.

Esta vieja ciudad
que me ha visto nacer
vivir y encanecer
entre el grito del alba
y el réquiem de la tarde
mi muerte cotidiana
mi cárcel mis pasiones
un alto muro blanco
la frente contra el muro
martillando las horas
buscando una ventana
limando las palabras
y esperando a los bárbaros.



¿Cara o cruz?

I. Premoniciones

La agonía el silencio el olvido
la soledad los claustros las heridas
la impotencia la sangre la esperanza
la palabra las cruces el camino
la memoria la rabia las derrotas
los espejos las manos los aullidos
los minutos las sílabas las noches
la libertad los hijos los umbrales
la mirada los sueños la ternura
las horas las ventanas el abismo.



II. Posesiones

Un laúd, un bastón, unas monedas
Eliseo Diego, El oscuro esplendor, 1966

El bastón, las monedas, el llavero
Jorge Luis Borges, Elogio de la sombra, 1969


Un abrazo un reloj esta penumbra
                     los pasos el camino
los ponientes el alba el nacimiento
                     el corazón los sueños
la música del mar la sed los hijos
las máscaras la cruz el pan el vino
el silencio la muerte el universo
una imagen de luz una palabra
                      la memoria el olvido.


César


                 …la certeza
de que cada mañana
cuando escribo mi nombre
sobre un pergamino
–o bajo la sombra
y la sangre de una espada–
puede ser la última vez.



Pasión de ánimo

de María García Granados

Aquí estoy y estamos todos
armando un círculo de llanto
que me hace levitar sobre la cama.
Cae la noche última y me asalta
una epidemia de Pasión de ánimo,
muero muy despacio de migraña
y desgano, de insomnio y fiebre.
No hay nombre más hermoso
en todos los ramajes de la lengua
que pueda resumir en dos palabras
esta enfermedad que me termina.
No hay hombre más hermoso
en todos los ramajes de la lengua.
Morir la vida por un par de palabras
que temblando, al oído, me dijera Martí.


(Poemas seleccionados de Nadie ante el espejo(Bokeh, 2007))

https://www.amazon.com/Nadie-ante-el-espejo-Spanish/dp/9491515802





Germán Guerra (Guantánamo, Cuba, 1966). Poeta, ensayista, fotógrafo y editor. Ha publicado Dos poemas (Strumento, 1998), Metal (Dylemma, 1998), Libro de silencio (EntreRíos, 2007), Oficio de tinieblas (Aduana Vieja, 2014) y Nadie ante el espejo (Bokeh, 2017). Prologó y fueron incluidos varios de sus poemas en Reunión de ausentes: Antología de poetas cubanos (Término, 1998), textos suyos también aparecieron en Island of My Hunger: Cuban Poetry Today (City Lights, 2007), en la Antología de la poesía cubana del exilio (Aduana Vieja, 2011) y en 13 poetas (Hypermedia, 2017). Reside en Miami desde 1992.

Compartir esta entrada