Ernesto García Alfonso: el cuerpo distorsionado inexacto



fuegos artificiales en un puente abandonado


mi padre me llevó a explorar una fabulosa colina que me permitía dominar

todo el horizonte cielo de nubes policromas disfrutaba vivir ese paisaje

más hacia el sur donde las mareas bajan todo procede del mar miren

lo que hace con las rocas en la cima de repente percibí que el sol estaba

saliendo todo el color en un instante como relámpago desde arriba

me extasiaba con la llanura inmensa colmada de casas diminutas evitaba

el agrietamiento.




hombre intentando atrapar peces voladores


no se nace con la capacidad necesaria para subsistir necesito mantener

la sangre cálida en todo el cuerpo y obtener una velocidad que me ayude

a sobrevivir en las olas en la planificación me puse muy delgado

como esqueleto para mantenerme a flote y disminuir la densidad en altamar

para expulsar la energía hacia las profundidades no hundirme aunque sufra

ciertas perforaciones nadar no es una actividad cotidiana necesito dejarme

llevar por la marea persona que lentamente consume un caudal a lo mejor

no sirve de nada pero nunca se sabe.




acero bebe


las áreas más calientes proceden de lo profundo del cráneo es la única pieza

que me gustaría conservar algunas de sus partes tienen muchas abolladuras

hacen dulces algunos metales no es ubicarse por encima de los demás

es ubicarse por encima de uno mismo la materialidad se mantiene al mando

por eso usa la fuerza utiliza el movimiento de una máquina y no su ser

independiente o si no como se habría partido ese pedazo de rodamiento

pieza de la armadura que cubría la cabeza el cerebro como plancha de acero

portátil.



huevo


debemos hallar el punto más bajo signando las ondulaciones del terreno

un relieve más profundo se correlaciona con el pensamiento los dos viven

una existencia doble la normalidad también es una cuestión de fondo

contemplarla desde abajo acrecienta su grandeza los cuerpos se muestran

ácidos y naturales desmaterializados acercarse al origen sería también

acercarse a la muerte a un bajo nivel de asentamiento los buenos

perforadores son esos que saben ubicarse vida muy baja o nula horadar

la altitud se alcanza de forma indirecta.




el hombre invisible


munch en la nevada ve algo borroso el hielo no es transparente

sino translúcido para congelarse las gotas necesitan que la temperatura

está por debajo de los cero grados así la sustancia oscila sin dirección alguna

la voluntad psicológica es mayor el tiempo real se descubre en el proceso

de enfriamiento después los organismos se derriten de forma natural

la verdad no es el ojo sino el cuerpo distorsionado inexacto

como esas especies que perpetúan y se propagan.




Ernesto García Alfonso (La Habana, 1974). Poeta. Premio Dador 2015 con el proyecto Bitonalidad. Ganador también del Premio Pinos Nuevos, 2013 con el libro Tratado del nô. Poemas suyos han aparecido en magazines como Rialta (México), y en sitios digitales como el del grupo El Palenque. Ha recibido otros reconocimientos entre los cuales destacan primera Mención en los concursos “David” de la UNEAC, 2011, y “Luis Rogelio Nogueras”, 2002, así como en el de La Gaceta de Cuba en el 2016. Su libro Segundo tratado: estructuras dobles, al que pertenecen estos poemas, aparecerá publicado próximamente por la editorial Letras Cubanas.

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