Laura Nivela: el universo se parte en la punta de mi lengua




Waminsi

A mi madre


1.
Ñukaka waminsita kani
Ñukaka Lilithshutimi kani

El universo se parte en la punta de mi lengua serpiente mientras el grito de las lombrices ventrílocuas me atraviesa el torso

Me senté en la puerta de Inti y lloré bloques de barro que cayeron directamente al cadáver de mi madre


Saltaremos en las uñas caídas y carcomidas de todos los insectos que vimos morir
Tu habitación es un criadero de larvas
y tus ovarios nunca darán fruto
Las casas nos encierran y tu vientre madre-rosa no para de digerirme
Mi abuela-serpiente dice: no subas a la montaña
porque lo único que encontrarás será nuestra ausencia



encontré mis órganos como borregos durmientes en las chakras bajo el sol / estaba ciega hasta que pude sentir como los planetas se balanceaban en el viento helado / soy ausencia
sólida hecha de bloques de barro / un camino largo con destino a un pueblo frío
              intervenida de maleza
                                          llena de bacterias
             perder el nombre es mi último pedido

desperdigarme y abrirme en el valle
madre, quiero ser waminsi amaru
sin labios sangrantes
sin cuerpo humano
solo ser pasto
ser tierra
no tener madre
ni vientre
que reclame mi huida.

2.
Tocó mis encías chorreantes de sangre
el verdadero tacto está en la boca y en mis dedos salados

Waminsi amaru recae en el pasto suave y frondoso con los labios carcomidos por el frío

en el páramo las bocas se abrirán como heridas eternas y sangrantes

¿Deseas oír? oír-me

Soy cada red de araña que conecta los asteroides que no paran de incendiarse porque el cosmos es un lugar para bailar aunque nuestras piernas estén rotas
El cuerpo jamás se ha retorcido entre las manos invisibles de los cuerpos celestes y las estrellas están solas desde los comienzos del tiempo / desde los primeros tiempos el apocalipsis están en su fase primigenia
La soledad es solo el comienzo de los cuerpos celestes

3.
El pequeño ser engendrado como cerdo duerme en mis brazos
no se da cuenta que en vez de piel tengo escamas
y que en la niebla el bosque está de cabeza
Los árboles mohosos son como el fondo de Mama Kucha, cerca del cristo que se corrompe de tantas manos

Hagamos un circulo de sal, hermanas
traigamos un pequeño cachito de mar que sólo pertenezca al páramo
hermano espacial y eterno de nuestro aquelarre





Amaru warmi

Desde que nací le pedí al Dios andrógino que bese la punta de mi lengua serpiente
Cuando crecí me atoraba en sus gigantes pies en el recorrido por la madre selva
me acariciaba el pelo y me convertía en ovillo, en fruto marginal
el gran retumbar de la tierra la podía sentir en los huesos, en cada pequeña unión de mi cuerpo entrelazado
soy una con la bestia decapitada
le pedí que me abrace con toda la galaxia que le queda.
me remojo en su saliva y duermo en sus sexos
nunca me quiero ir de su garganta mundo
cuando la escuche cantar me extendió la mano y me exprimió el cráneo
me dejó sin cuerpo
ahora soy fuego, aire y serpiente.





Laura Nivela (Ecuador, 1998) Actualmente estudia Literatura en la Universidad de las Artes, en la ciudad de Guayaquil. Cuenta con la publicación de «Vehículos amatorios», en la antología Tela de araña, muestra de textos y pre-textos (Editorial El Rasguño). Escribe en su bitácora personal https://crimesvenus.wordpress.com/. 

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