Aleisa Ribalta: Frank Guiller o de cómo el reo de la luz sueña la ciudad
Una ciudad vive en los ojos del insomne. Como tampoco duerme la ciudad, al otro lado del océano, alguien sueña en la penumbra esta psicodelia compartida. Muchos son los ojos y muchos los sueños que despierta la obra de Frank Guiller.
La luz quiere jugar, escapa y se regodea en los recovecos menos pensados, baila posesa en el laberinto de una ciudad tantas veces vista y fotografiada, una ciudad imposible de reproducir o diferenciar. ¿Qué quiere la luz? ¿Cómo puede Guiller seguir a esa loca? Baja las escaleras del metro, se mete entre las faldas, de las piernas y los bolsos salta a los anuncios de neón, pasa por una multitud multirracial y frenética, hasta que la vemos perderse ya exhausta en el barrio judío entre los dedos del rabino, como el agua…
Cuando, cámara cansada y ya alicaído por la nostalgia, regresa el reo de la luz; una New York única y siempre suya está por emerger. Ha amanecido la grafía de un arquetipo ileso y renovado. Frank Guiller, y Ranko (su alter ego), han vuelto a perpetuar el mito: La ciudad es de quien la logre poseer, al menos por un instante, ese que dura un click desenfrenado y certero, su mejor venganza.
Frank Guiller (La Habana, 1959). Artista visual y fotógrafo contemporáneo nacido en La Habana, Cuba, que emigro a Estados Unidos en 1988. Desde entonces vive en New Jersey. Estudió artes plásticas en el Museo Nacional de la Habana, Cuba, entre 1972 y 1973, y posteriormente en la Academia de Bellas Artes, San Alejandro, entre 1980 y 1984, donde se graduó de la especialidad de Grabado. Inició sus trabajos artísticos en el Fondo de Bienes Culturales de la Habana, donde trabajó como artista independiente en varios proyectos hasta abandonar el país en 1988.
Aleisa Ribalta (La Habana, 1971). Nacida en Cuba, reside en Suecia desde 1998. Poeta, traductora y coordinadora cultural. Ha publicado Talud (Ekelecuá Ediciones, 2018), poemario traducido también al catalán en edición bilingüe (bokeh, 2018) y Tablero (Verbo Desnudo, 2019). Ha participado en las antologías Poesía escrita por mujeres (Verbo(des)nudo, 2018) y Todas las mujeres (de fulanas y menganas) (Fundacionarte, 2018). Coordina el cuaderno digital La Libélula Vaga (lalibelulavaga.com), donde se difunde autores de todo el mundo.