Chus Pato: sé tallar bisontes que miran hacia atrás

Crédito de la foto de la autora: Andrea Costos

Cuatro poemas de Un libre favor 
(inéditos)



¿Qué os iba a decir
que prefería mirar las columnas salomónicas
los carros que cruzaban el puente y llevaban el oro a Roma?
Un puesto tenía yo en ese puente
un mandato de pobreza
Si, yo era la niña que desaparecía
y entraba por la puerta hablando de los perros
que se quedaba bajo el anuncio enorme de las horas
perdida en los sótanos que dan a un río
No tengas pena
sé tallar bisontes que miran hacia atrás
y soy proyectada al esplendor
Así la comprensión 
una centella que traza el camino en la noche
y juzga 
El cielo
lo discernimos 
por la arista
glauca
que la nieve no logró cubrir


Alondra
vuelve tu trino hacia mí
cautiva que soy del rayo
cóseme con aguja blanca
cántame 
junto a los caballos 







¿Cuándo
en qué momento
fuimos desollados y perdimos la piel
la posibilidad de permanecer inmóviles
como caballos 
soportando la galerna día tras día?


con el equipaje a cuestas
medimos la distancia
esperamos un tren, 
me recordarás pegada a la ventana
“trato de comprender…”


duele el cuarzo
se hielan las manos que lo trasladan
y lo limpian con agua de lluvia 


la mente idéntica a los bosques 
del color del bronce
los robles 


la piel las yeguas el equipaje el cuarzo 
el color verde translúcido de las aguas 
como los líquenes 


somos contemporáneas  








Íbamos con los errantes
trataba de robarles a los difuntos la moneda que traían para pagar la barca
no sabía que yo ya cruzaría ese mar
Tu cuerpo era el olvido
lo que nunca se puede recordar
era primavera
nadaba 


*


no sé que hacía con las monedas
algunas veces se arrimaba al barquero para que la pasase
o esperaba su turno y al llegar al distribuidor central
desistía
no estaba mutilada
hablaba de telas guardadas en una cómoda
del sexo de las mujeres 


*
ella era el alimento de los líquenes
de los árboles desnudos
la niebla era tan real que podías beberla
un paso abierto en la eclosión


del alma de la osa
del alma del caballo
nos nutrimos


la Nocturna
volvía 







Nada más cercano que los musgos
que los árboles desnudos
el cantar de las aguas
pero tú musgo
tú, no me hablas
¿o soy yo quien no escucha?
tendría que tenderme en la piedra a tu lado
mirar el cielo y solo mirar el cielo
dejar que la helada abriese un camino


tú, invierno
con tus oráculos en desorden
Eneida, tu
con el rebaño de ciervos
y el héroe abatiéndolos en la pleamar
uno por cada nave
me soñáis 


decidlo vosotros
sueños
el dolor genital de las hembras
cuando se vuelven y la vida muda póstuma


linfas
cantadlo!!!



(Traducidos del gallego al castellano por su autora
Chus Pato)


¿Que vos ía dicir
que prefería mirar as columnas salomónicas 
os carros que cruzaban a ponte e levaban o ouro a Roma?
Un posto tiña eu nesa ponte
un mandado de pobreza
Si, eu era a meniña que desaparecía
e entraba pola porta falando dos cans
que se quedaba baixo o anuncio enorme das horas
perdida nos sotos que dan a un río
Non teñas coidado
sei tallar bisontes que miran cara atrás
e son proxectada ao esplendor
Así a comprensión 
unha faísca que traza o camiño na noite
e xulga
O ceo 
discernímolo
pola aresta
glauca
que a neve non logrou cubrir


Alauda 
torna o teu trino cara a min
cativa que son do lóstrego
cóseme con agulla branca
cántame 
xunto aos cabalos
¿Cando
en que intre 
fomos esfolados e perdemos a pel
a posibilidade de permanecer inmóbiles
como os cabalos
soportando a galerna día tras día?


coa equipaxe ao lombo 
medimos a distancia 
agardamos un tren,
lembrárasme acaroada na ventá 
“trato de comprender …”


doe o cuarzo
xean as maos que o trasladan
e o limpan con auga de chuvia


a mente idéntica ás fragas
da cor do bronce
aos carballos 


a pel as eguas a equipaxe o cuarzo
a cor verde translúcida das augas 
como os liques


somos contemporáneas






Iamos cos errantes
trataba de roubarlle aos defuntos a moeda que traían para pagar a barca
non sabía que eu xa cruzara ese mar
O teu corpo era o esquezo
o que nunca se pode lembrar
era primavera
nadaba



non sei que facía coas moedas
as veces achegábase ao barqueiro para que a pasase
ou agardaba pola quenda e ao chegar ao distribuidor central 
desistía
non estaba mutilada
falaba de telas gardadas nunha hucha
do sexo das mulleres


*
ela era o alimento dos liques
das árbores espidas
a néboa era tan real que podías bebela
un paso aberto na eclosión


da alma da osa
da alma do cabalo
nutrímonos 


a Nocturna
volvía  
Nada máis achegado que os musgos
que as árbores espidas
o cantar das augas
pero ti musgo
ti, non me falas
¿ou son eu quen non escoita?
tería que me tender na pedra ao teu carón
mirar o ceo e só mirar o ceo
deixar que a xeada abrise un camiño …


ti, inverno
cos teus oráculos en desorde
Eneida, ti
co rabaño de cervos
e o heroe abaténdoos na mallante
un por cada nave 
soñádesme 


dicídeo vos
soños
a dor xenital das femias 
cando se volven e a vida muda póstuma


linfas
cantádeo!!!


 

Chus Pato (Ourense, 1955) es una de las voces más representativas de la poesía gallega contemporánea. Es autora de diez poemarios, publicados entre 1991 y 2013, por los cuales ha recibido varios premios, como el premio nacional de la crítica española, en su modalidad de poesía gallega y en dos ocasiones el premio Losada Diéguez. Además de su importante proyección en el ámbito anglosajón, sus libros han sido editados en países como Argentina, Portugal, Holanda y Bulgaria, y su obra ha sido recogida en decenas de antologías nacionales e internacionales. Ha participado en los festivales de poesía de Barcelona, Rosario, La Habana, Buenos Aires, Bratislava, Rótterdam, Amberes, Lisboa, Córdoba, Ottawa, Bruselas y Guayaquil. En 2015, su voz fue incorporada a las grabaciones de la Woodberry Poetry Room de Havard, en donde se recogen las palabras de figuras de las letras universales como Elizabeth Bishop y W.H.Auden. El 23 de septiembre de 2017 ingresó en la Real Academia Gallega.

Compartir esta entrada