Carlos Barbarito: hasta la sombra, el eco, la memoria
Este deseo, ¿es macho o hembra?
Desnudo en el pabellón de las sombras,
con otro catecismo en las manos (posesos,
ellos, desnudos entre sábanas revueltas,
los sexos húmedos, las manos crispadas
hacia un remoto dios que adelgaza)
¿Es macho?
¿cuchillo que interesa la carne viviente,
boca que sopla sobre un breviario
de páginas de cobre?
¿Es hembra?
¿carne prensada por el peso
de tanto amor o de tanta muerte,
pez de aliento abierto o sellado
enterrado en lava, arcilla frías?
De puro milagro, no por ciencia,
se sostiene.
***
Aún
el viento no tiene lengua,
el fuego no tiene casa,
el agua no encuentra fuente,
ni vaso.
Aún
todo está roto y disperso,
roto y disperso.
***
¿Quién grita? (El mar,
desde sus bocas y las bocas de los peces).
¿Quién llora? (Entra
en un túnel, no dice adiós,
tiene los labios sellados, antes
de perderse en lo oscuro levanta una mano).
¿Quién pide? (Llueve
y ya no es temprano, se moja
hasta la sombra, el eco, la memoria).
¿Quién ama? ¿Quién odia?(Se
abrazan o se lastiman, y es como una misma cosa,
ruedan hasta el fondo
y allí caen, con los ojos abiertos).
(De La luz y alguna cosa)
II
Hubo, se hizo, se dijo.
Oyeron, respiraron,
sintieron, durmieron, despertaron.
Hubo gravidez, frutos,
silencio, bordes, alimento.
Y fluir, corteza, danza.
Estuvo la inocencia y pasó.
Se oyó un gran ruido
de estrella rota en el centro.
Luego sal, ramas afiladas,
charcos, arena, sombras.
¿Qué envejeció sino el mundo?
¿Qué mundo surgió
sino una tenaz sucesión de residuos?
Entonces, ¿volver a escribir el libro
con lo que quedó, éter
o niebla, oquedad,
figuras sin nada que las lubrifique?
(De Piedra encerrada en piedra)
***
Y de mí qué se embarca, qué ruta emprende…
…It looked as if a night of dark intent
Was coming, and not only a night, an age…
Robert Frost, Once by the Pacific
Y de mí qué se embarca, qué ruta emprende;
de mi mano, torpe música ciega
y una herida en el aire que exhalo.
Ignoro el pasado y el porvenir de la estrella,
qué se oculta bajo la tierra que piso,
por qué lo que se busca queda siempre del otro lado.
Estoy solo. Estás sola.
El perro acude y nos lame las manos.
¿Acude o se trata de un sueño?
Dejo una marca en la madera.
Ésta, con la punta del cuchillo.
¿Dejo una marca o lo sueño?
Sí, hablábamos de remotas constelaciones,
de súbitos prodigios, de lluvias extrañas;
pero sobrevino el silencio y fue espeso,
se hizo la tiniebla en pleno día
y ya no hubo razón para rarezas y milagros.
Y no pudimos vestirnos.
Y no pudimos desnudarnos.
***
Pero la noche es ciega y el día trae inquietud…
Pero la noche es ciega y el día trae inquietud
de animal que husmea un súbito nuevo olor en el aire;
las horas no resuelven la mixtura, el amasijo
y avanzan en base a reflejos, a cavilaciones,
a luces bajas que reverberan; la coz
abandona su lucha contra el aguijón,
el hijo no abandona la casa,
la casa se lo traga.
***
Aquí y solo, hablando …
AH! LE POÉTE écrit pour le vide des cieux…
Pierre Jean Jouve
Aquí y solo, hablando con nadie.
Desde el follaje, el constante árbol sombrío.
El niño no se apiada y se extravía en el agua.
Se apaga, se cierra con su secreto.
Para la santidad basta con un silencio espeso.
Para matar basta con un color, ocre o bermejo.
Rodean la ciudad, la devastan e incendian.
Lo profundo se divide y la pesca no se inicia.
Recogerán pañuelos donde nada perdura.
Habrá, seguro, un ojo caído
y un No entre llanto y sangre.
Un humo erróneo, sin fuego.
Un padre tallado en bronce, eterno e inmóvil.
Una cal de la China, un siglo sin tu sexo.
El arco se tensa, la flecha se parte.
Se rompe la respuesta contra el metal del eco.
El corazón es inhábil, todo pájaro naufraga.
Un vacío al que sólo acuden el tiempo y los motores.
Un lenguaje al que tal vez sólo yo conozca.
O conozcan ciertos y raros animales, los muertos
(De Falla en el instante puro)
CARLOS BARBARITO nació el 6 de febrero de 1955 en la ciudad de Pergamino, provincia de Buenos Aires, la Argentina, y reside en Muñiz, también localidad bonaerense. Por su obra poética obtuvo primeros premios y otras distinciones, y ha sido incluido en antologías, en su país y en el extranjero. Fue traducido al holandés, italiano, inglés, catalán, francés, griego, persa, filipino, turco y portugués. Ha publicado, entre otros, los siguientes poemarios (en la Argentina y otros países de América y Europa): Poesía quebrada, Teatro de lirios, Éxodos y trenes, Páginas del poeta flaco, Parte de entrañas, Bestiario de amor, Viga bajo el agua, La luz y alguna cosa, Desnuda materia, Puntos de fuga, La orilla desierta, Piedra encerrada en piedra, Figuras de ojo y sombras, Música humana y de paramecio, Un fuego bajo un cielo que huye, Cenizas del mediodía, Feu sous un ciel en fuite (traducción de Patrick Cintas), Paracelso y Falla en el instante puro. En el campo de las artes plásticas publicó dos volúmenes: Acerca de las vanguardias. Arte argentino siglo XX(Comisión de Homenaje a Jorge Feinsilber, Buenos Aires, 1990) y Roberto Aizenberg. Diálogos con Carlos Barbarito (Fundación Federico Jorge Klemm Editora, Buenos Aires, 2001).